En mi familia siempre se habló de política; con orgullo y pasión. Nuestra primera televisión a color, la compraron mis padres un 20 de Noviembre : nos decían que era para ver a todo color el entierro que llevaban toda su vida esperando . De eso no me acuerdo, pero sí de una noche de otoño, donde en casa todo eran abrazos, besos y brindis. Mi padre, votante del PSP, era la primera vez que votaba al PSOE ; mi madre , siempre le votó. A la mañana siguiente, en mi colegio franciscano, todo era euforia , y yo , sin saber muy bien aun por qué ( tenía 13 años de los de entonces, no de los de ahora ) me abrazaba y tarareaba la sintonía socialista con los compañeros.
Así fue mi despertar a la política: pasión, ilusión, euforia. Nunca la he perdido, pero con los años se me fue disfrazando de frustación, desencanto, de tristeza por los ideales mancillados, de las memorias olvidadas, de los muertos muertos en cementerios y cunetas, de los muertos muertos en el olvido.
Mi sentimiento hacia el PSOE apenas pendía de un hilo, hilo que como el de Ariadna aun resistía a pesar de los intentos de los dirigentes por soltarlo.
Y en estas, llegamos al borde del abismo, y como no se puede negar lo evidente una y otra vez , Rubalcaba dejó de hacer de D. Tancredo y cedió.Esto me ha permitido conocer un mundo que aún estando tan cerca de mí, física e ideológicamente, nunca había reparado en él. Empecé a oir hablar de un catedrático de universidad, filósofo, de la vida y del socialismo.
Asistí a su presentación y volví a oir hablar de pasión, de injusticias, de sociedad, de estilo de vida, de naturaleza, de política sobre la dictadura de los mercados, de federalismo, de República, de ecología, de SOCIALISMO, sin ambages, sin ataduras, sin eufemismos.
Pero sobre todo, recuperé la ilusión. Durante todo el fin de semana, me hablaran de lo que me hablaran, yo sólo acertaba a responder : he conocido a Jose Antonio Pérez Tapias. Y me ha devuelto la ilusión por la política, por el socialismo, por el PSOE. Resuenan en mi cabeza una y otra vez sus palabras, como un mantra celestial. " El PSOE es un partido antiguo, pero no viejo. No partimos de cero, tenemos una historia, una memoria que defender, y un futuro que construir desde este presente ". El PSOE debe volver a los ciudadanos y ciudadanas, sus auténticos propietarios.
Quiero que sea el próximo Secretario General, porque pone palabras a mis pensamientos; porque rebosa sabiduria, bonhomía, ética, dignidad.
Me devuelve a mi partido, a aquella ilusión de mis padres en el 82, a aquellos abrazos y besos. Cuando te apasiona la política, hacer política es una responsabilidad, para que no la hagan otros por tí. Aquí me teneis, de vuelta al socialismo en el PSOE, pero en un nuevo espacio, que se llama Izquierda Socialista, y , como dijo Beatriz Talegón, a la sombra de un recio árbol, asentado sobre fuertes raices socialistas : Jose Antonio Pérez Tapias.
Así fue mi despertar a la política: pasión, ilusión, euforia. Nunca la he perdido, pero con los años se me fue disfrazando de frustación, desencanto, de tristeza por los ideales mancillados, de las memorias olvidadas, de los muertos muertos en cementerios y cunetas, de los muertos muertos en el olvido.
Mi sentimiento hacia el PSOE apenas pendía de un hilo, hilo que como el de Ariadna aun resistía a pesar de los intentos de los dirigentes por soltarlo.
Y en estas, llegamos al borde del abismo, y como no se puede negar lo evidente una y otra vez , Rubalcaba dejó de hacer de D. Tancredo y cedió.Esto me ha permitido conocer un mundo que aún estando tan cerca de mí, física e ideológicamente, nunca había reparado en él. Empecé a oir hablar de un catedrático de universidad, filósofo, de la vida y del socialismo.
Asistí a su presentación y volví a oir hablar de pasión, de injusticias, de sociedad, de estilo de vida, de naturaleza, de política sobre la dictadura de los mercados, de federalismo, de República, de ecología, de SOCIALISMO, sin ambages, sin ataduras, sin eufemismos.
Pero sobre todo, recuperé la ilusión. Durante todo el fin de semana, me hablaran de lo que me hablaran, yo sólo acertaba a responder : he conocido a Jose Antonio Pérez Tapias. Y me ha devuelto la ilusión por la política, por el socialismo, por el PSOE. Resuenan en mi cabeza una y otra vez sus palabras, como un mantra celestial. " El PSOE es un partido antiguo, pero no viejo. No partimos de cero, tenemos una historia, una memoria que defender, y un futuro que construir desde este presente ". El PSOE debe volver a los ciudadanos y ciudadanas, sus auténticos propietarios.
Quiero que sea el próximo Secretario General, porque pone palabras a mis pensamientos; porque rebosa sabiduria, bonhomía, ética, dignidad.
Me devuelve a mi partido, a aquella ilusión de mis padres en el 82, a aquellos abrazos y besos. Cuando te apasiona la política, hacer política es una responsabilidad, para que no la hagan otros por tí. Aquí me teneis, de vuelta al socialismo en el PSOE, pero en un nuevo espacio, que se llama Izquierda Socialista, y , como dijo Beatriz Talegón, a la sombra de un recio árbol, asentado sobre fuertes raices socialistas : Jose Antonio Pérez Tapias.
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