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Noche de Reyes

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Para los niños, esta es la noche más mágica del año sin duda. Y no desde el punto de vista consumista, sino desde el de los sueños por cumplir.Uno abandona la infancia , la inocencia de la infancia, el día que descubre la verdad. Hubo un tiempo, en que perdí esa magia, en que esta noche se convirtió en una rutina más de la sociedad del bienquedar. Pero llegaron ellas, y volví a ver la vida con los ojos de un niño, volví a creer en lo mágico e irreal, me reencontré con mi Peter Pan. Y ahora, disfruto de la noche de Reyes como el niño que un día fui y no quiero volver a dejar de ser.
Dejad que los niños seamos niños, al menos por esta noche.

Si eres un niño, o si sientes la ilusión como un niño, o si vives la vida como un niño, esta es la noche más hermosa, más mágica, más feliz del año.
Siempre.
Por que hubo otro tiempo, otro lugar, en el que , ni en el peor de los años posibles, faltó nunca un regalo, por humilde que fuera, por sencillo que pareciera. Nunca me faltaron regalos, aunque solo fuera un libro, o un disco de esos que había de vinilo.
Siempre tuve un caballo Furia esperando en Martín de los Heros, o mi primer Trivial en Lista.
Llegaron momentos en los que la Navidad era un tiempo de negrura añadida, de felicidad ajena, de alegría foránea que no podíamos compartir. Pero siempre nos quedaba esta noche.
Esta noche, que vuelve a ser mágica porque dos pequeñas mujeres, me devuelven al País de Nunca Jamás, me devuelven al mundo de la ilusión por lo imposible, por lo inexplicable. Me devuelven el sueño de abrir una puerta , y con ojos desorbitados, y risa nerviosa abrir regalos en un confuso ritual de éxtasis.
La vida, para mí, es mirar cada día con ojos de niño, es sorprenderme cada día por la maravilla de ver una flor abierta en el jardín. La vida es ser feliz como el niño que no sabe de donde pueden salir tantos presentes como nos regala la propia vida.


Mision cumplida
SS MM los Reyes Magos de Oriente ya han pasado por casa , dejando su carga de ilusión y amor.
Esta es sin duda una de las noches más mágicas del año, y así debemos vivirla, en especial los más pequeños que viven de manera muy especial este día.
Me ha emocionado ir a un centro comercial, y ver la carita de los niños y niñas esperando para saludar a Gaspar, o una niña tirando de la chaqueta de su padre para llevarle hasta él. 
El día que desaparece esta inocencia, probablemente estamos empezando a dejar de ser niños, salvo que anide en nuestro corazón el espíritu de Peter Pan, como es mi caso.

Inevitablemente en un dia como hoy me invade la nostalgia; nostalgia de levantarme por la mañana y comprobar que a pesar de todo, este año también habían venido los Reyes; nostalgia de encontrarme con un buen libro y un mejor disco de música, un balón de fútbol, un juego, un juguete, mi caballo Furia, ilusiones y sueños; como en tantas otras cosas, hasta que no he sido padre no he comprendido el inmenso sacrificio que hicieron los míos, y como tantisimas otras veces, ya es tarde para agradecerles que si soy lo que soy, es gracias a él y a ella. Veo la inmensa ilusión de mis hijas, y siento la felicidad de mis padres en lo más profundo de mi corazón

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